Nos dieron el aviso de que Sofía había ido a parar a la perrera, recién parida con sus cachorros. Venía de una casa donde no la cuidaban y varios de sus peques habían fallecido sin atención veterinaria. Una vez en la perrera (la podéis ver en la segunda foto con una de sus hijas), los cachorros de Sofía fueron saliendo adoptados, pero como suele ocurrir, ella al ser adulta se quedaba sola sin adopción. Así que decidimos rescatarla.